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DÍA MUNDIAL DEL AGUA - CUIDEMOS EL AGUA Y AYUDEMOS A FRENAR LA PROPAGACIÓN DEL COVID-19

El 22 de marzo de cada año se celebra el Día Mundial del Agua para generar conciencia en los seres humanos sobre la importancia de este recurso natural para la vida en el planeta Tierra. Este año las Naciones Unidas estableció que el lema se centrara en el cambio climático, y la importancia de cómo se gestiona el agua para ayudar a reducir las inundaciones, las sequías; la escasez y la contaminación del agua. Los humedales contribuyen a través de su funcionamiento con la prestación de muchos de esos servicios ambientales.

La mayoría de las actividades sociales y económicas de los países dependen en gran medida del abastecimiento de agua dulce y de su calidad. El acceso al agua potable, saneamiento e higiene es un derecho humano fundamental para la población. En Uruguay el agua potable llega al 99% de la población nucleada del país, por lo cual podemos considerarnos privilegiados, pero debemos tomar conciencia de la importancia de este recurso a nivel mundial. Se calcula que más de 2.200 millones de personas en el mundo no tienen acceso al agua potable, por lo que es necesario buscar medidas para abordar esta situación y garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos (Objetivo de Desarrollo Sostenible No 6: Agua y saneamiento para todos antes de 2030).

Agua para frenar el Coronavirus

En este momento el mundo entero se encuentra luchando contra un enemigo invisible que es el COVID-19  y la higiene personal es una de las formas de combatirlo. Lavarse las manos es esencial para contener la propagación de COVID-19 y muchas otras enfermedades infecciosas. En estos momentos es invalorable tener accceso a agua y jabón, y para aquéllos que lo tienen es su responsabilidad lavarse las manos regularmente y de esta forma luchar contra el coronavirus.

Pero no es así en otras partes del mundo, en muchos países las personas no tienen suficiente agua para beber y cocinar por lo que es muy difícil que puedan conseguir agua para lavarse las manos con frecuencia. Es por eso que es muy importante cuidar este recurso. Lavarnos las manos regularmente no significa que dejemos correr el agua de la canilla indiscriminadamente.

Siga cinco pasos para lavarse las manos de la forma correcta *

Lavarse las manos es fácil, y es una de las formas más eficaces de prevenir la propagación de microbios. Las manos limpias pueden detener la propagación de los microbios de una persona a otra y en toda la comunidad, desde sitios como su casa y lugar de trabajo hasta guarderías infantiles y hospitales.

Siga siempre estos cinco pasos:

  1. Mójese las manos con agua corriente limpia (tibia o fría), cierre el grifo y enjabónese las manos.
  2. Frótese las manos con el jabón hasta que haga espuma. Frótese la espuma por el dorso de las manos, entre los dedos y debajo de las uñas.
  3. Restriéguese las manos durante al menos 20 segundos. ¿Necesita algo para medir el tiempo? Tararee dos veces la canción de “Feliz cumpleaños” de principio a fin.
  4. Abra nuevamente el grifo y enjuáguese bien las manos con agua corriente limpia.
  5. Séqueselas con una toalla limpia o al aire.

* https://www.cdc.gov/handwashing/esp/when-how-handwashing.html